La nota principal fue la alegría, la gran concentración humana durante todas las fiestas, que se desarrollaron día y noche, demostrando el más alto nivel de cultura y de tranquilidad del orden público.

Estoy muy agradecido por haberme honrado con el título de alcalde honorario de mi pueblo natal, que me dio la oportunidad de transmitir mi amor por la tierra que me vio nacer, de comunicarme con tanta gente que hacía muchos años no había visto y recorrer las calles y sitios para mí muy importantes, que marcaron una impronta en mi formación, tales como: la iglesia, la escuela, el liceo, el hospital, la casa consistorial,  el consejo municipal, la cárcel, el cementerio, el hogar juvenil, la unidad deportiva, la casa del deporte, la casa cural, la casa de la cultura y el asilo de ancianos.

Tuve la suerte de hacer estos recorridos con el comité de la alcaldía honoraria, compuesto por unas bellas personas, que en todo momento estaban atentas y solícitas conmigo y con mi esposa. Vaya para ellos un agradecimiento especial, a ANÍBAL ZAPATA, a GUSTAVO MARTÍNEZ, a la profesora CRISTINA y a DANIEL TORO, el bachiller auxiliar de la policía que me obliga también a agradecer al capitán CASTELLANOS, jefe del distrito.

Finalmente, quiero expresarle mi grata sorpresa de ver un municipio que está rodeando a su burgomaestre, cosa que no es gratuita. Usted en menos de un año saneó las finanzas, transformó la ciudad y estoy seguro de que en el resto del período cumplirá su programa que es muy ambicioso, pero lo realizará.

Reciba un cordial saludo en unión de mi esposa MARÍA TERESA.

Atento amigo y servidor.